LÍQUENES, la unión hace la fuerza.


 "Siempre me han encantado los líquenes porque tienen la cualidad de la tierra de las hadas, anillos de plata sobre una roca, curiosas formas pequeñas de huesos o cuernos o de caparazón de una criatura marina."

El sentido del asombro. 1965. Rachel Carson.




 Es difícil encontrar unos organismos vivos tan exitosos como los líquenes, ocupan todos los ambientes continentales de nuestro planeta, de los desiertos más áridos a las zonas polares, de la primera línea de playa hasta lo alto de las montañas. La clave de su versatilidad ecológica está en la simbiosis de hongo y alga: el hongo -micobionte- protege al alga con sus hifas evitando así la desecación, por su parte el alga -fotobionte- elabora sustancias nutritivas con ayuda de la luz solar. Esta asociación permite al liquen vivir en lugares donde alga y hongo no podrían sobrevivir por separado. 

Esta sorprendente colaboración entre organismos de dos reinos diferentes es mucho más que la suma de sus partes. Los líquenes son los primeros colonizadores, los primeros seres vivos en establecerse en sustratos nuevos, como la roca volcánica que acaba de solidificarse o el espacio rocoso que queda al descubierto cuando retrocede un glaciar. También son los más rápidos en instalarse en todo tipo de materiales artificiales, sobre un muro de piedra, sobre un tejado, en el asfalto o en el cemento, en una malla de plástico; no hay engendro humano que se le resista.


Líquenes sobre roca volcánica en la costa norte de Tenerife.


Líquenes sobre roca volcánica en la costa norte de Tenerife.


Líquenes sobre roca basáltica procedente de una colada volcánica del Pitón de la Fournaise (La Réunion). En las grietas de la roca han crecido también helechos.

Cuarcitas con líquenes crustáceos en el Cerro del Milano
Sierra de la Mosca (Cáceres).

Líquenes sobre cuarcita. Cáceres.

Liquen crustáceo sobre cuarcita. Probablemente
  Acarospora hilaris. Cáceres.

Líquenes sobre cuarcita. En la parte superior,
Caloplaca carphinea. Cáceres.

Líquenes sobre cuarcita. En el centro de la imagen
  Umbilicaria pustulata. Cáceres.

Umbilicaria sp. (probablemente U. grisea) sobre cuarcita. Cáceres.


Farallones de cuarcita en El Salto del GitanoParque Nacional de Monfragüe (Cáceres). Las manchas amarillentas de la cuarcita se corresponden con el liquen crustáceo Acarospora hilaris.

Estrecho de la Peña Amarilla. Geoparque Villuercas-Ibores- La Jara (Cáceres). El nombre guarda relación con la coloración del liquen Pleopsidium flavum (=Acarospora oxytona).
Fotografía de Juan Gil Montes.

La simbiosis hongo (generalmente un ascomiceto) y alga o cianobacteria resulta ser más compleja de lo que parece: en 2016 Toby SpribilleToby Spribille y su equipo publicaron un artículo en la revista Science, donde describen un tercer componente encontrado en un liquen, se trata de una levadura (hongo unicelular). El dueto hongo-alga resultó ser un trío, incluso a veces pueden ser más los microorganismos, hay socios simbióticos adicionales (levaduras, bacterias) que forman parte del sistema dinámico al que llamamos liquen. Tampoco es de extrañar, qué sería de nosotros, pobres humanos, sin las comunidades microbianas que habitan nuestro cuerpo.

"Los líquenes son biosferas pequeñas que incluyen organismos fotosintéticos y otros que no lo son, combinando así los principales procesos metabólicos de nuestro planeta. Los líquenes son, en cierto modo, miniplanetas, mundos a pequeña escala."

La red oculta de la vidaMerlin Sheldrake. 


"Dientes de perro" (afloramientos verticales de pizarra) con líquenes. Los Llanos de Cáceres.


"Dientes de perro" (afloramientos verticales de pizarra) con líquenes. Los Llanos de Cáceres.


"Dientes de perro" (afloramientos verticales de pizarra) con líquenes. Los Llanos de Cáceres.

Xalocoa ocellata, liquen crustáceo sobre roca caliza.
  El Calerizo (Cáceres).

Detalle de Xalocoa ocellata, liquen crustáceo sobre roca caliza.
El Calerizo (Cáceres).

Squamarina sp., liquen sobre roca caliza. El Calerizo (Cáceres).


Poste de cemento colonizado por líquenes. Cáceres.

Malla de plástico colonizada por líquenes.

Líquenes epífitos sobre tronco de encina. Evernia prunastri y Physconia sp. (arriba a la izquierda). Cáceres.

Evernia prunastri, liquen epífito sobre encina. Cáceres.

Xanthoria parietina, liquen epífito. Cáceres.

"Barba de capuchino", Usnea sp., liquen epífito. Tenerife.

Usnea sp., liquen epífito sobre brezo (Erica reunionensis).
Isla de La Réunion.

Los líquenes de Haeckel

Ernst Haeckel fue un naturalista y filósofo alemán que popularizó la teoría de la evolución de Charles Darwin, fue el primero en acuñar el término ecología (del griego oikos y logos, estudio de la casa) tan importante para tratar de comprender las complejas relaciones de los seres vivos entre sí y con el medio donde viven. 

Ernst Haeckel. Fotografía de 1906. Nicola Perscheid.
Imagen tomada de Wikipedia.

Haeckel realizó más de mil grabados, siendo uno de los grandes ilustradores del mundo natural del siglo XIX. En su obra Kunst-Formen der Natur (Obras de Arte de la Naturaleza) incluye una bella lámina dedicada a los líquenes del género Cladonia, un buen ejemplo de la conjunción de Ciencia y Arte.

Portada de Kunst-Formen der Natur (Obras de Arte de la Naturaleza), libro de litografías de Ernst Haeckel. Imagen tomada de Wikipedia.

Diversas especies de CladoniaKunst-Formen der Natur. 
Ernst Haeckel. Imagen tomada de Wikipedia.

También se fijó en los líquenes la escritora, ilustradora y naturalista británica Beatrix Potter. No es de extrañar que la literatura infantil pueda a veces inspirarse en las formas asombrosas de estos seres diminutos.

Cladonia cristatella. Acuarela de Beatrix Potter.

Líquenes en la Antártida

En 1915 Ernest Shackleton y su tripulación, a bordo del Endurance, quedaron atrapados en los hielos de Isla Elefante en la Antártida y lograron sobrevivir a las condiciones ambientales gélidas durante más de un año, refugiándose cerca de una colonia de pingüinos.
La simbiosis alga-hongo es tan exitosa que podemos encontrar líquenes en los lugares más inhóspitos del planeta, desde las cumbres del Himalaya a los desiertos más secos. También crecen en la Antártida, donde se conocen más de 400 especies de líquenes frente a tan solo  2 de plantas. Un caso muy llamativo es el de Mastodia tesellata, especie bipolar ya que crece tanto en regiones árticas como antárticas. El alga Prasiola vive tanto de forma libre como asociada al hongo formando el liquen Mastodia. La forma de vida de este liquen en condiciones extremas guarda relación con la presencia de excrementos de los pingüinos y otras aves marinas que aportan nutrientes. Tanto el liquen como la tripulación del Endurance encontraron refugio en condiciones parecidas para resistir a las durísimas condiciones del invierno austral. En este interesante artículo de National Geographic, Beatriz Martínez-Marín y José Ignacio García-Plazaola nos lo cuentan con detalle.

 El Endurance atrapado en el hielo y hundiéndose.
Royal Geographical Society.


Prasiola (alga) y Mastodia (liquen).
Foto Beatriz Fernández Marín.

El liquen del alquitrán

En la isla de Vancouver, en la British Columbia canadiense, por encima de la línea superior de las mareas se observa una franja negra de unos 60 centímetros de ancho que se puede considerar la señal de tierra firme. Podríamos pensar que se trata de una mancha de algún vertido petrolero que contaminó la costa, pero no, se corresponde con el liquen negro o liquen del alquitrán 
(Hydropunctaria maura) que es el primer organismo que vive encima de los márgenes del agua. Una vez más los líquenes ocupan espacios donde otros organismos no pueden sobrevivir.

Colonia de focas en la zona intermareal, por encima se distingue la franja negra del liquen del alquitrán . Isla de Vancouver, British Columbia (Canadá).

Saliente rocoso donde se observa la banda oscura del liquen del alquitrán. Isla de VancouverBritish Columbia (Canadá).

El liquen astronauta

El llamado liquen errante (Circinaria gyrosa) fue seleccionado para participar en el proyecto BIOMEX (Biology and Mars Experiment). Ejemplares de este liquen fueron mandados al espacio en la ISS (International Space Station) y durante 18 meses fueron sometidos a condiciones ambientales semejantes a las del planeta Marte. Tras su viaje espacial nuestro particular liquen astronauta recuperó su actividad fotosintética. Su hábitat natural en Tejera Negra (Guadalajara) tiene un amplio intervalo térmico (de -20ªC a 27ªC) que le hace estar preparado para resistir a las condiciones ambientales marcianas. Todo esto podría parecer una historia de ciencia-ficción, pero es una prueba más del carácter extremófilo de estos seres fascinantes, estos líquenes son idóneos para la investigación astrobiológica.

El liquen errante (Circinaria gyrosa).
Foto de Leopoldo García Sancho.

Los líquenes como bioindicadores

Los  bioindicadores son organismos que son muy sensibles a los cambios ambientales de forma que nos pueden avisar de que hay algo en nuestro entorno que no va por buen camino y puede afectar a nuestra salud. Los líquenes son excelentes bioindicadores de la calidad del aire ya que los contaminantes atmosféricos se acumulan en ellos provocando su deterioro. Los líquenes epífitos -los que crecen en la corteza de los árboles- son los más adecuados para realizar estudios de este tipo.

Líquenes utilizados como bioindicadores de contaminación atmosférica. British Museum (Natural History).

LiquenCity es un proyecto de ciencia ciudadana que estudia la diversidad de líquenes en los árboles de Madrid y Barcelona para conocer la calidad del aire de estas ciudades.

La polilla moteada y la evolución

La polilla moteada o mariposa del abedul (Biston betularia)  ha servido para explicar la selección natural en la evolución darwiniana. En esta historia entran también en juego  nuestros simbióticos amigos. Esta mariposa presenta dos formas: la forma clara -que se camufla perfectamente en la corteza de los abedules cubierta de líquenes- y la forma oscura -que contrasta sobre el fondo claro y se convierte en un blanco fácil para los depredadores. 
En condiciones normales, con aire limpio, la forma clara es más abundante por su coloración críptica; pero a partir de la Revolución Industrial cambiaron las tornas, el aire se ensució, los líquenes -muy sensibles a la contaminación- desaparecieron de los troncos de los abedules y la forma oscura comenzó a ser más abundante. Este proceso se conoce como melanismo industrial.

Evolución de la polilla moteada. Imágenes tomadas de Wikipedia.

No es liquen todo lo que parece

En 2018 Eduardo Morano y Raúl Bonal (científicos de la Universidad de Castilla-La Mancha y la Universidad de Extremadura respectivamente) descubrieron una nueva especie de araña, Araneus bonali, endémica de la España peninsular. Lo que más llama la atención en esta nueva especie es el colorido verdoso que se parece mucho al de los líquenes que crecen en el tronco de los robles, un curioso caso de mimetismo que permite a estas arañas mantenerse a salvo de los depredadores.

Araneus bonali, araña descubierta por Eduardo Morano y Raúl Bonal. Imagen tomada de Wikipedia.


Muchas gracias a Helena Rodríguez, Nere Sorrentino e Isaac Rubio del grupo LÍQUENES DE ESPAÑA de Facebook, que me ayudaron a identificar algunas especies.


Guía de los líquenes del Parque Nacional de Monfragüe

(Vicent Calatayud, José María Corrales y Santiago Hernández)

Este libro está agotado, pero se puede descargar en pdf en el siguiente enlace.

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